Una discusión entre dos hombres, en medio de una cancha de piki vóley, dejó un fallecido a tiros y a la mujer del asesinado con una herida de bala en su cadera.
El hecho fue porque un señor llegó en su camioneta a comprar asaditos, estacionado su vehículo en la cancha y la hoy víctima fatal le reclamó la situación.
El oficial Inspector Luis Armoa, subjefe de la comisaría de Santaní – San Pedro, habló con Fátima Rosalba Villasanti (32), la pareja del jugador de piki asesinado.
El agente contó a EXTRA que ella dijo que se encontraban participando de un juego de piki vóley con su concubino Roberto Villalba Martínez de 36 años. Añadió que en la cancha, el dueño Virgilio Escobar, vende asaditos y bebidas. La señora narró que cerca de las 21.10 de la noche del domingo, llegó en su camioneta Bernardino Morel Benítez (41), vecino de la calle 20 de Enero. El señor es lisiado con una prótesis en una pierna.
Bernardino metió su 4×4 en la cancha y le pidió a don Virgilio un asadito. Como los muchachos querían jugar otro juego de piki, Roberto le exigió que saque su vehículo porque estorbaba.
Don Bernardino le dijo a Roberto que venga y lo saque él si se animaba, y ambos empezaron a discutir, dijo la señora. En cierto momento don Bernardino encaró a Roberto y luego sacó su arma de fuego y le jugó un tiro a su contrario, pero falló.
La señora dijo que le estiró a su pareja para tratar de llevarlo a otro lugar, pero él se zafó y se fue nuevamente hacia donde estaba Bernardino.
Allí el señor sacó de nuevo su arma disparó varias veces matando a Roberto. Ella sufrió un refilón de bala en su cadera al querer defenderle a su pareja.
En la siesta de ayer allanaron la casa del asesino en la calle 20 de Enero e incautaron la camioneta Mitsubishi. El acusado de asesino no fue ubicado, en el lugar
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