El hombre aprenderá su lección, ligó 11 años de cárcel.
Sofia (nombre ficticio) vivió un martirio en carne propia. Su ex, Juan Andrés Rivarola le hizo la vida imposible cuando ella decidió cortar el círculo de violencia que tenía con el hombre.
Ella aguantó mucho. Y denunció a Juan Andrés por violencia doméstica, pero la fiscalía analizó bien la historia y más allá de una violencia familiar, la chica vivía con el miedo de ser asesinada.
Fue así que la fiscal Mercedes Caniza amplió la calificación y lo imputó por intento de feminicidio. Esta es la historia.
AMENAZAS
Rivarola amenazó a pareja desde la esquina de su vivienda, situada en una compañía de la ciudad de Areguá.
La advirtió vía mensaje diciendo: “de esta noche no pasás, vas a ver por qué no pasás esta noche”.
Posteriormente, Rivarola prendió fuego a la casa de la mujer.
Sofía despertó con problemas respiratorios debido a la intensa humareda y vio a su ex, Juan Andrés dentro de su casa, riéndose maléficamente. No solo quemó la casa sino que le robó el celular Samsung.
Cortar los dedos
Juan Andrés era (es) un hombre cruel. Le amenazó a su expareja de que iba a cortar
los dedos de su hijo de 6 años. Ella se quedó paralizada del miedo en medio del humo. Ahí, el hombre le roció nafta, la intención era que ella se queme con la casa. ¡De terror!
Sofía pudo salvarse esa vez. Denunció y recibió resguardo policial porque Juan Andrés siempre aparecía cerca de su casa. La acechaba como un lobo a su presa.
Según informe de la fiscalía, 6 de junio de 2021, el hombre continuó su campaña de intimidación contra la joven madre, con llamadas telefónicas, enviándole audios y fotos del celular robado hasta las 03:00 horas del 7 de junio.
Estos acosos tuvieron lugar a pesar de que ambos habían dejado de ser pareja meses antes.
La violencia y crueldad del hombre eran irracionales, por eso se le imputó por intento de feminicidio y los jueces no dudaron, habían pruebas de sobra.
Fue condenado a 11 años de cárcel
