Un grupo de liberales del movimiento Nuevo Liberalismo solicitó al Directorio del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) adelantar las elecciones para presidente de la nucleación política, que actualmente recae sobre Hugo Fleitas, tras la remoción de Efraín Alegre.
Los integrantes del movimiento presentaron una nota al Directorio del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA) para convocar a una Convención Nacional y debatir adelantar las elecciones para nuevo presidente de la nucleación política.
Hugo Fleitas, como vicepresidente del PLRA, se quedó con la presidencia tras la remoción de Efraín Alegre mediante una Convención Nacional, luego de la derrota en las elecciones generales de la dupla Efraín Alegra-Soledad Núñez.
La senadora Celeste Amarilla indicó que el mandato hasta el 2026 es demasiado y cuestionó la falta de conducción del partido por parte del ex gobernador Hugo Fleitas.
“No lo critico a Fleitas, capaz me iba a pasar a mí también si yo era la suplente, es que todo lo que se dio hizo que Hugo no tenga el liderazgo del partido”, expresó.
La legisladora sostuvo que tanto el senador Éver Villalba como el intendente de Fernando de la Mora, Alcides Riveros, son buenos candidatos para liderar el PLRA, aunque prefiere que sea el intendente, ya que considera importante la tarea de su colega en el Parlamento.
“Tengo entendido que Éver también podría ser un buen candidato para el partido. Sin embargo, entre Éver y Alcides, es mejor Alcides, por el trabajo de Éver acá en el parlamento, no coincidiría, más adelanta tal vez, lo mismo digo de Eduardo Nakayama, de mí”, manifestó.
Para la legisladora, Alcides Riveros está afianzado en su municipalidad y puede disponer del tiempo para esto.
La parlamentaria dijo que una fecha estimativa para las elecciones podría ser fin de año o principios del año que viene, pero que hay que escucharle a los convencionales.
Sobre las finanzas, dijo que conseguirán la plata como siempre y que nunca la plata alcanza para nada.
Si bien Efraín Alegre había ganado las elecciones por su partido, pese incluso a la división en las filas internas, terminó siendo removido tras perder las elecciones para presidente de la República por tercera vez consecutiva.
